La FACULTAD DE RELACIONES LABORALES Y RECURSOS HUMANOS DE LA UNIVERSIDAD DE CASTILLA-LA MANCHA se creó en 2010, tras la conversión de los estudios de la Diplomatura en Relaciones Laborales en los de Grado en Relaciones Laborales y Desarrollo de Recursos Humanos, por lo que su origen se sitúa en la ESCUELA UNIVERSITARIA DE RELACIONES LABORALES. Éste fue el primero de los centros de esta Universidad que comenzó a impartir la Diplomatura de Relaciones Laborales, cuyo origen, a su vez, está, como en todas las Escuelas de este tipo de España, en la antigua titulación de Graduados Sociales, con la particularidad de que fue el centro impulsor en España del plan de estudios que permitió el paso de la antes citada titulación de Graduados Sociales a la de Relaciones Laborales. No fue un simple cambio de nombre, sino una transformación completa al poner en práctica un programa académico nuevo que respondía al desarrollo de los conocimientos científicos universitarios sobre una parcela de la realidad social extremadamente importante en los tiempos actuales: el modo en que el trabajo se utiliza en los procesos productivos. Es asunto de la mayor importancia pues el trabajo en todas sus facetas es el medio que tienen los seres humanos para satisfacer sus necesidades, pero el trabajo no es separable de la persona que trabaja, por ello tiene que ser tratado cuidadosamente cuando se trate de su aplicación a los procesos productivos, pues la dignidad de la persona es un valor superior de toda organización social civilizada.

Con esta fundamental orientación en su base, la Facultad de Relaciones Laborales y Recursos Humanos de la UCLM pretende la formación de profesionales que den respuesta a las necesidades que en la sociedad española existen de personas cualificadas para resolver los problemas que en torno a la producción y el trabajo se generan en los diversos tipos de empresas existentes, y de modo especial en la Comunidad de Castilla-La Mancha. En efecto, en esta Comunidad existen empresas de muy diverso tipo, como unipersonales con ocasional o escaso uso de trabajadores externos por cuenta ajena, empresas familiares, cooperativas, o societarias de muy distinto tamaño, desde pequeñas a grandes empresas, aunque el predominio sea el de las pequeñas y medianas.

En España, tradicionalmente, los profesionales más directamente implicados en las tareas de dirección, administración y gestión de todo tipo de relaciones de trabajo, ya desde una perspectiva pública, ya desde una perspectiva empresarial o privada, han sido formados universitariamente por medio, sobre todo de la Diplomatura de Relaciones Laborales, aunque también podían provenir de otras titulaciones.

La insuficiencia de todos estos estudios para proveer a la sociedad de tan importantes profesionales como son los que se ocupan de la dirección y gestión de nuestras “vidas profesionales y laborales”, se venía poniendo de manifiesto.

El diseño del nuevo Grado en Relaciones Laborales y Desarrollo de Recursos Humanos, que sustituye a la Diplomatura de Relaciones Laborales, pretende dar respuesta a los problemas aludidos dotando al egresado de una formación al tiempo generalista y ambiciosa, centrada en gran parte en la comprensión de los aspectos de organización y funcionamiento de la empresa, en la que necesariamente se inserta la gestión clave de Recursos Humanos, pero ampliada también a la comprensión del trabajo en sus dimensiones social y psicológica, histórica, jurídica y económica.

La formación que reciben los estudiantes en esta Facultad les permite resolver los problemas que en la gestión diaria de estas empresas puedan presentarse, tanto si dan asesoramiento externo a ellas, actuando como profesionales colegiados, como si lo hacen como asalariados. Por otro lado la formación impartida les permite ser competentes para desarrollar su labor en múltiples áreas de la función pública, desde la enseñanza a los servicios sociales.

Una acusada característica de esta Facultad es, por otra parte, que no se conforma con preparar profesionales competentes desde un exclusivo punto de vista técnico, sino que pretende, por encima de todo, darles la oportunidad de adquirir una amplia cultura que les haga ser personas inquietas y abiertas al conocimiento, preocupadas por sus semejantes. En definitiva, aspira a que por encima de todo sean buenos ciudadanos.

En la actualidad, como todos los centros de las Universidades de Europa, está inmersa en un proceso de cambio para adaptar sus enseñanzas al Espacio Europeo de Educación Superior que permitirá a sus estudiantes y titulados una mayor circulación dentro de la Unión Europea. En este sentido incentiva que sus estudiantes se beneficien de los programas Erasmus y pasen una parte de su periodo docente en alguno de los centros europeos con los que nuestra Universidad ha suscrito convenios.